Residencia Ítaca

Para personas mayores en La Rioja

Llama ahora al 674 87 90 80

Disponible las 24h

La Residencia Ítaca: un edificio con alma e historia

En el corazón de Munilla, un pequeño pueblo riojano rodeado de naturaleza y tradición, se alza un edificio singular que ha sido testigo del paso del tiempo y de la transformación de toda una comunidad. Hoy, convertido en la Residencia Ítaca, este espacio no solo ofrece cuidado y bienestar a personas mayores, sino que guarda entre sus muros siglos de historia viva.

 

Siglo XVI: la ermita de Santo Tomás

Los orígenes de este lugar se remontan al siglo XVI, cuando en este mismo emplazamiento se levantó la antigua ermita de Santo Tomás. Aunque el edificio fue transformado con el paso de los siglos, se conservaron los cimientos y algunos elementos originales de gran valor histórico y simbólico, como el arco y la pila bautismal, que hoy se integran como elementos decorativos en la residencia. Estos vestigios no solo preservan la memoria del pasado, sino que siguen impregnando el lugar de recogimiento, serenidad y respeto por lo esencial.

Siglo XX: la fábrica de calzado

Con la llegada de la industrialización y el auge del sector textil y del calzado en la comarca, el edificio fue reconvertido en una fábrica de calzado, símbolo del progreso y del trabajo duro de generaciones enteras. En sus naves se tejió una parte importante del desarrollo económico de Munilla, que durante décadas fue un polo industrial de referencia en La Rioja.

Aún se conserva el torno de madera de la época en que fue fábrica de calzado y de hecho, en la recepción existe un pequeño museo con los materiales encontrados durante las obras.

Siglo XXI: casa rural con encanto

Tras el cierre de la actividad industrial, el edificio volvió a reinventarse. Aprovechando su encanto arquitectónico, su enclave privilegiado y su aire de refugio, se transformó en una acogedora casa rural, que atrajo visitantes de todo el país. Durante años, fue un espacio de descanso, reencuentro con la naturaleza y conexión con la vida sencilla del entorno rural.

Además de hospedar a viajeros, el espacio también abrió sus puertas a la cultura. En sus instalaciones se celebraron actividades artísticas y musicales, entre las que destaca la celebración del Munijazz, un festival de jazz con reconocimiento dentro y fuera de La Rioja. Así, el edificio se convirtió en un escenario de encuentro entre la tradición y la expresión artística contemporánea.

Hoy: Residencia Ítaca, un nuevo comienzo

Hoy, ese mismo edificio abre una nueva etapa como la Residencia Ítaca, un proyecto que aúna atención especializada, cercanía humana y respeto por la historia y la memoria. En sus habitaciones amplias y luminosas, en sus zonas comunes abiertas al paisaje, y en cada rincón cuidadosamente rehabilitado, late una vocación clara: ofrecer a las personas mayores un hogar digno, lleno de vida y con raíces profundas.

En Ítaca, creemos que cuidar del presente también es honrar el pasado, y por eso este lugar no es solo una residencia: es un símbolo de transformación, de comunidad y de continuidad. Un espacio donde cada etapa ha dejado su huella, y donde cada residente aporta ahora su propia historia.

Más publicaciones